Dolores suizos

Antes de ir a Suiza, me dediqué a realizar muchas previsiones a fin de que la visita a los alpes sea perfecta: Me fui al dentista, intenté bajar un poco de peso... haciendo ejercicios, llevé lo mínimo indispensable, las tarjetas de crédito cargadas, copias y copias de los documentos de donde tenía que ir, un "hiden-pocket" para tener siempre mi pasaporte y 100 coquitos para cualquier eventualidad.

Bueno. Llegué a Zurich después de dos paradas, en una islita llamada Bonaire y después de 9 horas... Amsterdam. Chevere!!! Pero eso no es parte del tema de hoy.

Resulta que llegué al lugar donde tenía que estar... pero... lamentablemente... al segundo día me di con la sorpresa de que mi muela recién curadita... la que jamás pensé que podía hacerme daño... me golpeó tan fuerte que me ponía a llorar y morir del dolor. Alucinen todo el mundo saliendo a hacer cosas por la noche y yo estaba con mi diente como el comercial "con camisa de fuerza" Ibuprofenos iban y venían... pero la caja estaba como 20 francos suizos... (0.8 de euro) y me las tomaba como caramelitos... menos mal que no se hizo hueco el estómago. Fui al dentista suizo, el cual me hizo un par de dziiiz, dziiiz con la maquinita, una plaquita, un floro de que tenía algo dentro y una buena infección, un par de pastillitas... y a cobrarrrrr... la irrisoria suma de 150 francos... que no lo hicieron rico a el... pero si me hicieron muy pobre!!!!

Empezó a pasar la vaina... y estuve entonces con la ola de calor... solo que una fantita... una fanta condenada costaba... 3.5 francos!!!!!!!!!!, y el calor era insoportable. O tomabas agua o tomabas agua. Nada mas. Lo que hacía entonces era tomar mucha agua... pero alucinen que el redbull costaba igual... nada. Agua natural a 4 francos la botellita de medio litro. Chez. En sólo eso me habré gastado unos 100 euros durante mi estadía... y un poco mas.

La fiebre futbolera estaba en pleno auge, tanto así que yo torcía por Brasil... O garoto estaba ahi. Pero cuando los eliminaron, te volviste anti alemán. es que se creían lo máximo pues... Otra vez me salgo del tema.

Volviendo. Me prestaron una bici (allá son muy confiados) y bueno, me puse a pasear por todos lados, para arriba hasta abajo. Pero... al llegar al Lago Zurich, imaginen que veías unos especímenes es-pec-ta-cu-la-res. Pero una me llamó la atención. Por que? porque estaba en Topples. Que vergüenza ajena! pero ahi igual seguía viendo, pensando que era una desvergonzada, que como era posible que esté así mostrando la pechonalidad, y así como dicen ellos alcanzar un bronceado perfecto?. Bueno. Mientras seguía con mis meditaciones cucufatas... me olvidé que manejaba bici, y la llanta delantera se metió en un riel. Me saqué la michiiiii.

Como consecuencia, me doblé el pie, y yo que ya estaba misio porque ya me regresaba al día siguiente... quería ir a pie hasta la estación del tren, pero con eso... ya no podía. Tuve que ir -acompañado con mi dolor horrible de muelas y pie - a la estación del Tren a sacar plata con la tarjeta de crédito... y salió 50 francos... pero la bici la estropee.. y me costó 30 repararla... y entonces me quedaron 20 para comer y el taxi para regresar.

La comida? fue la del hotel. Para pagar el Taxi? Justo salía una china que también se iba al Banhoff (ahi mismo) así que compartimos el taxi pagando 8 euros cada uno. Me quedaron 12, que era para mi agüita y para mi sandwich, y me regresé misiazo para aqui.

Lo mas chistoso fue que en el avión la pegué de paramédico bilingüe... ayudando a la gente de por mis costados, luego de que en vez de que me sienten con una italiana hermosisisma, un chistoso me ganó, se sentó ahi y las aeromozas no hicieron respetar mi derecho a mi sitio (habían "duplicado" los asientos... y me sentaron con un chino que no hablaba nada.. solo chino. o sea 14 horas aburrido. Entonces hablé con el clón de la tia Eliane que estaba al otro costado y unas francesas que les dolían los oidos porque no estaban acostumbradas a viajar tanto...

¿Cual fue mi recompensa? que a los dos días de haber regresado... me dió apendicitis... y me tuvieron que operar... Como verán... yo no estoy para recibir un baño de florecimiento... sino que me agarren a rudazos...!